Queremos a El mundo perdido, que es notablemente inferior, pero, ¿qué niño de los 80 no la ha visto hasta quemar el VHS? Le perdonamos los fallos de guion y el intento de replicar el estilo y éxito de la película original.
El que no lo perdona es él mismo. Spielberg se encontró en mitad de esta continuación mastodóntica sin entusiasmo ni ilusión por continuar la historia. En el libro de entrevistas recopiladas por Lester D. Friedman y Brent Notbohm incluyeron los comentarios del director acerca de El mundo perdido y lo cierto es que no pudo ser más sincero.
"Me encontraba en medio de la secuela de Jurassic Park, cada vez más impaciente conmigo mismo con respecto al tipo de películas que realmente me gusta hacer", comienza.
A menudo sentía que me había metido en el DeLorean de Doc Brown y había retrocedido en el tiempo cuatro años y medio, y que solo estaba sirviendo un banquete al público, pero no me estaba ofreciendo nada desafiante. Me encontré pensando: '¿Eso es todo? No es suficiente para mí'
El director ha hablado sobre la secuela en varias ocasiones, siempre reconociendo que su esfuerzo fue inferior. Él mismo ha señalado que su interés en ver a los dinosaurios como animales decayó mientras hacía la segunda parte y terminó convertida en una película más de criaturas y acción.
"Mis secuelas no son tan buenas como las originales porque me confío demasiado en cada secuela que hago. Esta película recaudó muchísimo dinero, lo que justifica la secuela, así que llego pensando que va a ser un éxito rotundo y termino haciendo una película inferior a la anterior", respondió en una entrevista con The New York Times y, por si había alguna duda, añadió: "Me refiero a El mundo perdido y Parque Jurásico".

Da la sensación de que Spielberg tiene todo controlado y que su cabeza es un torrente de planos, encuadres e historias, pero no es así. A menudo se siente perdido en el set de rodaje y se enfrenta al bloqueo del artista. "[Tiburón] es una película que tuvo un éxito rotundo y me dio total libertad creativa personal, todavía la recuerdo y ahora digo que fue el momento más infeliz de mi vida como cineasta, porque pasaban días enteros y no teníamos ni una toma".
De ahí que pase el testigo a otros realizadores cuando ya no cree en su producción. Lo hizo con Jurassic Park. Tras su desánimo con El mundo perdido decidió continuar en la tercera película solo como productor ejecutivo. Fue Gareth Edwards han realizado las siguientes entregas.